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Detenida la ciudad que nunca duerme

El Ferrari F80 paraliza Nueva York al aterrizar en Estados Unidos
Texto: Ben Barry
Puede que Nueva York sea la ciudad que nunca duerme, pero hoy se paraliza cuando el Ferrari F80 hace su sorprendente debut estadounidense en las calles de Manhattan. Con una fusión de diseño progresista y tecnología híbrida innovadora, el F80 es el complemento perfecto para el más futurista de los paisajes urbanos.

El F80 nació en las pistas de carreras, pero también se siente como en casa en Times Square

Cuando el F80 llega a Times Square, el epicentro de Nueva York bulle de actividad. Las vallas publicitarias se disputan la atención en un resplandor de neón, las bocinas de los taxis amarillos suenan y los turistas se detienen a mirar a su alrededor mientras los ciudadanos corren de un lado a otro. Sin embargo, en medio del incesante movimiento, el Ferrari atrae todas las miradas.

La brillante estructura blanca de The Oculus es un telón de fondo llamativo para el diseño progresivo del F80

En dirección sur por Church Street antes de desviarse hacia Greenwich, el F80 llega a The Oculus, la llamativa pieza central de la nueva construcción del World Trade Center. Con sus nervaduras de acero blanco brillante que se extienden hacia el cielo como alas, este faro de esperanza contrasta con las atrevidas formas del F80 y nos recuerda la resistencia de esta increíble ciudad.

El sol de Manhattan resalta la fusión de estética y función del F80

En un transbordador desde la punta de Manhattan, el Ferrari F80 se aventura en las proximidades de la Estatua de la Libertad y la Isla Ellis, símbolos perdurables de Nueva York como puerta de Estados Unidos y crisol del mundo. El emblemático horizonte de Manhattan se alza orgulloso en la lejanía, testimonio de las ilimitadas posibilidades de la ambición humana.
04 marzo, 2025